
Más que formación: las ventajas de vivir y estudiar en otra ciudad
Cada vez más jóvenes en España toman las maletas y se mudan a otra ciudad para estudiar. No es algo menor: según datos oficiales del Sistema Universitario Español, el 31,4 % de los estudiantes universitarios cambia de provincia para realizar sus estudios. Este movimiento no solo transforma su día a día, sino que los empuja desde el inicio hacia una nueva versión de sí mismos.
Vivir lejos de casa significa aprender a cocinar tus platos favoritos por ti mismo, organizar horarios, asumir responsabilidades y, al mismo tiempo, abrir la puerta a compañeros con historias distintas o a lenguajes nuevos. Pero esta aventura va más allá de lo personal. Estudiar fuera abre puertas académicas que no se asoman en tu ciudad natal: especialidades únicas, profesores con trayectorias distintas, oportunidades de prácticas en empresas locales, redes de contacto que no existirían si no hubieras dado ese salto.
En Planeta Formación y Universidades, acompañamos ese viaje. Nuestra vocación es ofrecer a los estudiantes la oportunidad de formarse, crecer y descubrir su propio camino dentro y fuera del aula.
¿Qué implica realmente “estudiar fuera de casa”?
Mudarse a otra ciudad para estudiar es asumir responsabilidades que antes tal vez pasaban desapercibidas. Tendrás que familiarizarte con servicios locales —transporte, bancos, permisos, compras, reparaciones—, y eso exige tiempo, curiosidad y paciencia. También implica reconstruir tus costumbres: la ruta al campus, las pausas de estudio, los momentos de relax, todo acaba adquiriendo un matiz distinto.
No todo el mundo vive esta experiencia igual, y tampoco tiene por qué hacerlo. Estudiar fuera no es una obligación ni una fórmula universal de crecimiento. Hay quien prefiere quedarse en su entorno y aprovechar las oportunidades locales, y eso también puede ser un camino valioso.
Por qué cada vez más estudiantes deciden estudiar fuera
Cada año, más jóvenes se animan a cruzar fronteras académicas porque la educación se está volviendo más móvil. Programas de intercambio como Erasmus+ permiten pasar semestres en otras universidades europeas con reconocimiento del estudio. Además, muchas carreras tienen asignaturas o especialidades solo disponibles en ciertos centros, lo que obliga a moverse si quieres explorar áreas específicas.
También pesa el factor laboral, y es que las empresas valoran a quienes ya han vivido fuera, porque creen que son más adaptables y tienen experiencias diversas de contexto.
Ventajas personales de estudiar lejos de casa
Desarrollas independencia y autonomía personal
Cuando estás lejos, no queda otra que tomar decisiones por ti mismo: qué comer, cuándo dormir, qué priorizar. No hay llamadas constantes para recordarte que debes estudiar o salir de casa. Al final tú eres el gestor de tu día a día. Esa práctica continua nutre tu capacidad para confiar en tus propios juicios.
Aprendes a gestionar tu tiempo, tu dinero y tu hogar
Los gastos pequeños se acumulan: la compra diaria, el alquiler, el transporte, pequeñas reparaciones. Pagar una factura, saber cuándo ahorrar, decidir si conviene vivir un poco más lejos si el alquiler es más barato… Cada elección económica te enseña algo tangible que no suelen explicar en clase.
Conoces personas y formas de pensar diferentes
Compartes espacio con gente que viene de otros lugares. Conoces sus costumbres, sus ideas, sus conversaciones alrededor de una mesa. Descubres discursos distintos, formas de expresarse que no habías escuchado, maneras de entender lo cotidiano que abren grietas en tu pensamiento previo.
Te enfrentas a retos que fortalecen tu carácter y resiliencia
Habrá días duros: malentendidos, días en los que extrañarás lo de siempre, momentos en que equivocarse es parte del paso. Pero cada uno de esos retos pone a prueba tu capacidad de recomponerte: te adaptas, encuentras soluciones, vuelves a intentar. Y cuando logras superar el tropiezo, tienes más confianza en ti y en la forma en la que solucionas los problemas de tu día a día.
Beneficios de estudiar fuera a nivel académico y profesional
Acceso a universidades y centros formativos de mayor prestigio
En otra ciudad puedes acceder a centros con recursos que tu ciudad quizá no tiene: facultades con especialidades raras, bibliotecas mejor equipadas, laboratorios modernos. Esa elección te permite trabajar con profesores que son referentes en su campo y aprovechar infraestructuras que marcan la diferencia en tu formación.
Oportunidades de networking y prácticas en otras regiones
Estar en un entorno nuevo te acerca a empresas, estudios, instituciones que buscan estudiantes para colaborar. Hacer prácticas en compañías locales de la ciudad donde estudias te da experiencia real en el mercado laboral. También, asistir a eventos, ponencias o talleres allí te permite conocer profesionales, otros estudiantes, profesores con los que puedes conectar. Esa red de contactos puede servirte después para conseguir trabajo, proyectos o colaboraciones.
Mejora de tu empleabilidad al salir de tu zona de confort
Cuando te mueves, aprendes a adaptarte rápido, resolver imprevistos y tomar decisiones. Eso suma puntos al perfil profesional. Las empresas valoran candidatos que han vivido otras realidades, que saben moverse, que no temen al cambio. Tener en el currículum que estudiaste o hiciste prácticas fuera puede diferenciarte positivamente frente a otros candidatos.
Conclusión
Elegir dónde y qué estudiar no es solo una decisión académica: es el punto de partida de una etapa que puede transformar tu forma de aprender, de vivir y de mirar el futuro. Estudiar fuera de casa, enfrentarte a nuevos retos y descubrir entornos distintos te enseña mucho más que lo que aparece en un plan de estudios: te forma como persona, te conecta con realidades diferentes y te prepara para un mundo profesional en constante cambio.
Cada año, además, miles de jóvenes en España y estudiantes internacionales, especialmente de Latinoamérica, eligen nuestras universidades y centros para continuar su formación y dar un nuevo paso en su trayectoria personal y profesional.
Y es que, en Planeta Formación y Universidades acompañamos ese proceso para que cada estudiante —ya esté eligiendo su primer grado o FP, buscando una especialización o planteándose un cambio profesional— encuentre el camino que mejor encaja con sus intereses, habilidades y metas. Nuestro test recomendador te ayuda a descubrir qué empleos del futuro se ajustan a tu perfil y qué programa de FP, Grado y Máster te acerca a ellos.